En el mundo actual, cada vez más globalizado, es habitual residir en una nación como México mientras se estudia en instituciones del extranjero por vía electrónica o se trabaja para organizaciones de Gran Bretaña, Estados Unidos, Alemania, Japón o cualquier otro país. No importa a qué se dediquen o dónde trabajen, la mayoría de estas personas tienen algo en común: son multilingües.
Las personas bilingües disfrutan ahora de más ventajas que nunca: acceso a empleos mejor remunerados, posibilidades de estudiar en el extranjero e incluso la posibilidad de ampliar sus redes sociales o mejorar su salud.
A continuación se enumeran las 3 principales ventajas de ser bilingüe:
Se puede acceder a universidades de varios lugares del mundo: El dominio de la lengua inglesa es necesario para matricularse en cualquiera de las mejores instituciones del mundo. Hablar inglés con fluidez y que su dominio se verifique mediante pruebas como el IELTS que imparte el British Council son dos de las principales condiciones para solicitar plaza, independientemente de la nación en la que resida.
Mejores empleos y más alternativas: La necesidad de bilingüismo, especialmente en inglés comercial, va en aumento. Es imprescindible dominar al menos dos idiomas para incorporarse o progresar dentro de cualquier empresa multinacional. El periodismo, la educación, el desarrollo internacional, las relaciones internacionales y la sanidad son algunos de los campos en los que los trabajadores multilingües son un componente esencial de la estrategia de crecimiento y servicio. Hablar un segundo idioma da a las personas que trabajan en el sector empresarial la oportunidad de seguir carreras como intérpretes, traductores, profesores de idiomas, guías turísticos y otras ocupaciones.
Amplíe sus horizontes culturales y sociales: Dado que más del 50% de la información en Internet está actualmente en inglés, ser bilingüe, sobre todo en inglés, también le permitirá acceder y disfrutar de más libros, programas, películas, cursos, investigaciones y otros medios. Además, podrá interactuar con personas de todo el mundo, compartir ideas con ellas y establecer contactos.
Nunca se insistirá lo suficiente en el valor de ser bilingüe, aunque, según el Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas (MCER), no es necesario concentrarse o tener un nivel de inglés C2.
